Hablemos de China, de lo lejano que es percibido este país, de lo poco que sabemos su cultura y de lo mucho que tenemos que agradecerle a quienes hace miles de años, se dedicaron a estudiar el funcionamiento del cuerpo y se atrevieron a entender cómo las plantas, los hongos y las raíces, tenían efectos impresionantes en el bienestar y la salud.
Esta es una historia de emperadores, dinastías, plantas, energía y adaptógenos.
Ya hemos hablado de cómo llegaron los adaptógenos a posicionarse en occidente luego de su “descubrimiento” en plena guerra fría gracias a la importancia que tenían los soldados y astronautas en esta guerra, pero hoy vamos a ir un poco más atrás, precisamente al año 206 a.c., donde se encuentran registros del uso de plantas para ayudar al cuerpo a equilibrar sus sistemas en la Medicina Tradicional China.
→ Sabemos que leer sobre Medicina Tradicional China no es para todos, por eso creamos este resumen en caso de que te de pereza leer el artículo completo.
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Empecemos por lo fundamental: eso de lo que todos hablan hoy como el último descubrimiento de la corriente “new age”, no es más que el renacimiento de saberes y prácticas comunes desde hace milenios en algunos de los rincones más sabios del planeta. En rincones de dinastías y emperadores que sabían más de las cualidades de estas plantas de lo que probablemente alcancemos a descubrir en las próximas décadas.
Para hilar esta historia, debemos entender el contexto en donde se desarrollan estos conocimientos y es que, a diferencia de Occidente, en donde nos enfocamos en tratar los síntomas específicos con métodos más reactivos, en Oriente, particularmente dentro del contexto de la Medicina Tradicional China, se tiene una visión más holística y preventiva, enfocándose en mantener el equilibrio y la armonía interna como forma de prevenir las enfermedades antes de que se manifiesten.
Para la Medicina Tradicional China, todo se resume en armonía y balance, y para entenderlo es fundamental que hablemos del Qi.
El Qi se refiere a la energía vital o la fuerza vital que fluye a través del cuerpo. Esta energía es responsable de mantener la vida y la salud, y se cree que circula a través de caminos específicos en el cuerpo llamados meridianos. El Qi es fundamental para todos los procesos vitales, incluyendo el movimiento, el crecimiento, el sistema inmunológico, la transformación de los alimentos en energía y nutrientes, y el óptimo equilibrio de las funciones corporales.
Es aquí en donde entran a escena los adaptógenos, los cuales aunque no hayan sido nombrados de esta manera, eran utilizados para optimizar y balancear el flujo de Qi en el cuerpo, evolucionando sus usos en cada dinastía.
En la dinastía Han (206 a.C. - 220 d.C.), los adaptógenos se mencionan en textos antiguos como el "Shennong Bencao Jing", utilizados por emperadores para mejorar la energía y la longevidad, luego, durante la dinastía Tang (618-907), la medicina alcanzó niveles “avanzados”, integrando adaptógenos en formulaciones más complejas para fortalecer el sistema inmunológico y las funciones cognitivas como la concentración y la memoria. Más adelante, durante la Dinastía Ming (1368-1644), estos ingredientes se popularizaron entre todas las clases, utilizándose para mejorar la energía diaria y la resistencia física para finalmente, en la dinastía Qing (1644-1912), lograrse un entendimiento mayor de estas sustancias, volviéndose parte fundamental de sus protocolos médicos.
Pero entonces ¿por qué nos tomó tanto tiempo llegar a ellos?
Contrario a oriente en donde la medicina se ha desarrollado en un marco más intuitivo y desde una visión más abierta y holística, en este lado del mundo, hemos puesto toda nuestra confianza en el método científico según el cual solo luego de largas investigaciones y tras resultados contundentes, podemos confiar en x o y compuestos para tratar ciertas enfermedades.
Es así como con nuestros abuelos y bisabuelos, han muerto miles de conocimientos que eran practicados por nuestros ancestros y que han sido olvidados bajo la premisa de que no hay suficiente evidencia, mirando con malos ojos todo aquello que viniera con una etiqueta de "tradición milenaria".
Así que sí, los adaptógenos llegaron tarde pero hoy tenemos incluso investigaciones que respaldan el conocimiento que durante siglos, ya era conocido en china y tenemos la gran oportunidad de disfrutar de sus beneficios en nuestro día a día.
Conoce aquí nuestros adaptógenos.
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Resumen para los que solo quieren el chisme y ningún contexto.
Lejos de ser una moda, los adaptógenos han sido utilizados en la Medicina Tradicional China desde el año 206 a.C. para equilibrar los sistemas corporales.
A diferencia de la medicina occidental, que se centra en tratar síntomas de manera reactiva, la Medicina Tradicional China adopta un enfoque holístico y preventivo, enfocado en mantener la armonía interna.
Los adaptógenos, que no siempre se llamaron así, se han utilizado para optimizar el Qi, la energía vital que fluye a través de los meridianos del cuerpo. A lo largo de las dinastías, desde Han hasta Qing, estos componentes han evolucionado en su uso y comprensión, integrándose en formulaciones para mejorar la energía, la longevidad, y las funciones cognitivas.
Hoy, respaldados por investigaciones, estos antiguos componentes son reconocidos y utilizados globalmente por sus beneficios en la salud.
Conoce aquí nuestros adaptógenos.